J.J. Abrahams nos cuenta una historia de acción para adolescentes y adultos cargada de acción e intriga durante los primeros minutos que logra un suspenso importante que, por supuesto, nos recuerda irremediablemente a LOST.
SUPER 8 es una historia inocente, cómica y una especie de "versión contemporánea" precisamente de ET, lo cual nos explica perfectamente la razón por la que Spielberg se declaró tan emocionado con la producción.
Las actuaciones son creíbles, estereotipadas. Personajes clichés que finalmente facilitan el digerir la historia de una forma más ligera, minimizando las impresiones y permitiendo que el público esté abierto a la historia desde diferentes edades.
Finalmente, SUPER 8 es una muy buena opción de entretenimiento familiar con violencia moderada y suficiente, pero con muy buenos momentos de acción y producción que cuentan una historia poco novedosa, pero bien dirigida.
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