La comedia-horror definitivamente nunca ha sido bien valorada y temas que pueden ser fantásticos son llevados al cine con alto presupuesto cuando la historia es demasiado nefasta, tomemos el caso de JENNIFER'S BODY. TEETH por el contrario, es una fábula sin sentido cargada de entretenimiento.
Las actuaciones dentro de un rol de comedia son realmente amenas, Jess Weixler toma su papel y lo lleva a cabo de manera ágil, sin pretenciones; y Mitchell Lichtenstein como director definitivamente atrapa al espectador en una comedia-horror que el público (con mayor razón los hombres) no quiere ver.
La historia basada en el mito de la vagina dentada es poco sólida, sin embargo ampliamente innovadora y ligera, así que la película (a pesar de los genitales destrozados en el piso) termina por ser interesante, mordaz, algo zonza, pero divertida al final.
¿Recomendable? Definitivamente no para después de comer, absolutamente para las feministas, un divertido placer culposo para el resto de nosotros.
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